
Cuando ya no soy quien era… ¿Quién soy?
agosto 26, 2024
Cómo la migración nos transforma positivamente y en el acto
septiembre 9, 2024Emigrar a un nuevo país es un proceso lleno de desafíos y transformaciones. Y entre las tantas emociones que podemos experimentar, la frustración suele ser las más prominente, notoria y difícil de manejar.
Desde la sensación de haber tenido que abandonar nuestra tierra natal, dejar atrás nuestras amistades y familiares, hasta la dificultad de encontrar el trabajo adecuado, tener que forjar nuevas relaciones, sentirnos solos y desprotegidos o vivir en una vivienda que no nos parece natural llamar hogar, cada aspecto del proceso migratorio puede ser una fuente de estrés y desilusión.
La frustración en estos momentos críticos es completamente natural. Sin embargo, aprender a gestionarla eficazmente es crucial para nuestra adaptabilidad y bienestar a largo plazo.
La frustración puede surgir cuando nuestras expectativas no se alinean con la realidad que enfrentamos, y es en estos momentos cuando debemos encontrar estrategias para sobrellevar y superar los obstáculos.
Para manejar esta emoción de manera constructiva conviene que puedas: 1) reconocer tus emociones, 2) tomar distancia mediante una pausa y 3) enfocarte en encontrar soluciones.
- Reconocer las emociones
El primer paso para gestionar la frustración es reconocer y aceptar nuestras emociones. Ignorar o reprimir el malestar solo puede intensificar la frustración y afectar nuestra salud mental y física. Es esencial validar nuestros sentimientos como una respuesta natural a los desafíos migratorios. Permitirnos sentir y entender estas emociones nos ayuda a mantener un equilibrio emocional y a prepararnos para enfrentarlas de manera más efectiva.
Una forma de hacerlo es a través de la auto-reflexión. Pregúntate a ti mismo qué es lo que realmente está causando tu frustración. ¿Es el hecho de estar lejos de casa? ¿Es la dificultad para encontrar un empleo adecuado? ¿Es el ajuste a una nueva cultura y entorno? Identificar la raíz de tu frustración te permitirá abordar el problema de manera más específica y encontrar soluciones más adecuadas.
- Tomar distancia – Pausar para avanzar
En medio de la frustración, es vital tomar distancia de la situación para evitar una reacción impulsiva. Una pausa puede ser tan simple como tomar unos minutos para respirar profundamente, dar un paseo, o desconectar de la fuente de estrés por un tiempo. Este espacio temporal permite que nuestras emociones se calmen y nos brinda una perspectiva más clara sobre la situación.
Durante esta pausa, podemos practicar técnicas de relajación, como la meditación o la visualización, para reducir la intensidad de nuestras emociones. Al hacerlo, también podemos ganar claridad sobre nuestras prioridades y cómo queremos abordar el problema. Esta distancia emocional ayuda a prevenir decisiones apresuradas y nos permite regresar a la situación con una mente más abierta y serena.
- Enfocarse en soluciones
Una vez que hemos reconocido nuestras emociones y tomado un tiempo para calmarnos, el siguiente paso es enfocarnos en soluciones. Es fácil quedar atrapado en el ciclo de quejas y autocompasión, pero para avanzar es fundamental pasar a la acción. Reflexiona sobre las posibles soluciones a los problemas que enfrentas y establece un plan de acción realista.
Por ejemplo, si estás frustrado por la búsqueda de empleo, considera explorar diferentes redes de contactos, mejorar tus habilidades a través de cursos o talleres, o ajustar tus expectativas y estrategias de búsqueda. Si la vivienda es un problema, analiza opciones alternativas, como compartir un apartamento o encontrar el equilibrio entre tus expectativas y tu realidad. Al emigrar, algo vas a resignar, pero asegúrate de poder mantener aquello a lo que das más valor.
Recuerda que cada desafío que enfrentas en el proceso migratorio es una oportunidad para aprender y crecer. Con paciencia y perseverancia, es posible que descubras que los comienzos difíciles son simplemente el preludio de una experiencia enriquecedora y gratificante.
Al gestionar la frustración, tendrás mayor capacidad para superar las dificultades iniciales y avanzar hacia una adaptación exitosa en tu proceso migratorio. La paciencia y la constancia serán nuestras aliadas en este camino, ayudándonos a transformar las frustraciones en oportunidades de crecimiento personal y profesional.
En Equilibrio Mental Health podemos contribuir en tu proceso, brindándote distintas herramientas que te permitan gestionar tus emociones y progresar en tu nuevo destino, con menos frustraciones y más soluciones.
¡Estamos aquí para acompañarte!
Equilibrio Mental Health, equilibrando emociones.